Evidentemente las historias más tradicionales de la cultura nórdica se encuentran protagonizadas por espectaculares dioses guerreros y descomunales criaturas que aún al día de hoy cuentan con la fuerza suficiente para atrapar al interesado a través del desarrollo de sus complejos y aún así fascinantes acontecimientos.
Teniendo en cuenta que la oralidad fue el medio para que todo este folclore no se perdiera con el pasar del tiempo y que tanto mitos como creencias religiosas protagonizadas por los más increíbles dioses nordicos puedan seguir siendo revividas, bien vale la pena llevar a cabo un pequeño repaso por aquellas deidades que encontraron la manera de influir y generar gran recordación.
Dioses nórdicos más destacados
- Odín: al establecerse como rey entre los dioses, es la deidad más popular, es el dios de la guerra, la muerte y la sabiduría, asimismo domina la magia y la poesía. Se le distingue por su lanza y por estar siempre acompañado por dos cuervos.
- Thor: bastante peligroso por la gran cólera que le acompaña, el dios de trueno, los viajes y las batallas es sinónimo de poder y fuerza. Con un martillo como arma, esta divinidad de barba roja y ojos fulgurantes también destinó un poco de tiempo para orientar a los humanos sobre el oficio de forjar metales.
- Freya: diosa de la fertilidad, el amor, la profecía y la belleza, puede transformarse en ave cuando requiere pasar de un mundo a otro y se le reconoce por su bonito collar al igual que por su emblemática carroza tirada por gatos.
- Loki: es un dios oscuro, timador y embustero que aprovecha el dominio que tiene sobre el elemento fuego para perjudicar.
- Frigg: diosa de los cielos, es un referente para el manejo del hogar al igual que para llevar un buen matrimonio y una maternidad exitosa. La gran habilidad por la cual se distingue es la profecía.
- Tyr: dios de la justicia y del valor, guerrero absoluto y bastante sabio. Se le recuerda por haber perdido un brazo en medio de su heroísmo.
La adoración a los dioses nórdicos
Los centros de fe definitivamente no fueron una constante salvo unas cuantas excepciones, en su lugar si se sabe con más precisión sobre estatuas y representaciones físicas de dioses. En cuanto a sacrificios humanos, se sabe por ejemplo que el dios Odín de alguna manera inspiraba prácticas con la horca, así que la existencia de estrangulamientos en función de una deidad era algo que sucedía.