Salir de la cama a la hora señalada es ya todo un gran reto para muchas personas, sin embargo es totalmente posible que este momento deje de ser una lucha y pase a ser gratamente motivante. Para lograrlo, veremos unos cuantos hábitos recomendados para tener un buen día, los cuales una vez integrados al ritmo de vida serán no solo algo cotidiano sino también muy productivo.
La idea será por supuesto realizar algunas acciones que nos aporten armonía en todos los aspectos del ser, conozcamos entonces con más detalle aquello que puede favorecernos bastante de aquí en adelante.
Los mejores hábitos para un día productivo
- Despertarse temprano y agradecer. Si bien no es sencillo adoptar la costumbre de madrugar, la verdad es que con esta acción el tiempo podrá administrarse mucho mejor y rendirá más que si nos pasamos demasiadas horas en la cama. Por otra parte, una oracion al despertar estimula el acto de agradecer, el cual es trascendental para valorar cada pequeño detalle.
- Planea tu día. Aunque para algunas personas resulte algo aburrido agendar cada minuto del día, este es el mejor camino para hacerse responsable de todas las ocupaciones y garantizar por ejemplo el no olvidar pagar alguna factura.
- Un buen desayuno. El mismo hecho de levantarte temprano, te permitirá disponer del tiempo suficiente para sentarte con tranquilidad a disfrutar un conjunto de alimentos equilibrados que puedan suministrarte la energía necesaria para enfrentar tus ocupaciones. Recuerda que entre más saludables sean las recetas que elijas, más beneficios obtendrás.
- Un poco de ejercicio. Activarte tanto física como mentalmente es fundamental y para ello una rutina de ejercicio sencilla puede marcar bastante la diferencia. Si no te apetece desplazarte hasta un gimnasio, puedes acondicionar un espacio de tu casa para ejercitarte o quizás simplemente salir a trotar alrededor del barrio.
Cuidado con la tecnología
Se ha establecido que las personas que evitan revisar sus redes sociales o correo inmediatamente luego de despertar pasan un día mucho más tranquilo y sosegado que aquellas que por el contrario acuden a su dispositivo móvil una vez abren los ojos.
Perderte en tu teléfono al despertar no trae nada bueno, por el contrario solo te resta concentración para ubicarte verdaderamente en tus objetivos, además por supuesto de robarte tiempo precioso para dedicarte a cosas que realmente si pueden influir en la consecución de tu felicidad e incluso salud, tal y como es el caso de recargarte espiritualmente, ejercitarte o alimentarte bien.