Pese a que es mucho el trabajo que se realiza en cuanto a educar los creyentes en torno a la figura del Espíritu Santo, se tiende a escuchar con regularidad muchos errores de interpretación que de acuerdo con la Biblia, no encuentra un asidero suficiente como para ser considerados como válidos.
A partir de lo anterior, nos hemos propuesto analizar en detalle cada de uno de ellos, para que usted pueda ir un paso más allá en reconocer cada una de esas características que vale la pena conocer para lograr establecer un trato más cercano y de calidad con el Espíritu Santo.
8 cosas que deben saberse sobre el Espíritu Santo
Además de tener claridad sobre la oracion al espíritu santo, lo cual ya se da por entendido en el caso de cualquier creyente, tienen muy en cuenta cada una de las dimensiones que se hacen a continuación:
- En primera instancia, se destaca que el Espíritu Santo es la tercera persona de la Trinidad. En ese orden de ideas, no se trata de un poder o de una fuerza, ya que la propia Biblia le atribuye una personalidad que se distingue, del mismo modo que ocurre con el Padre y el Hijo.
- Se lo menciona en muchas ocasiones en el nuevo Testamento. A continuación se hace un breve recuento:
- 56 veces en los evangelios.
- 57 veces en el libro de los Hechos.
- 112 veces en las cartas de Pablo.
- 36 veces en el resto del Nuevo Testamento.
- Está capacitado para pensar, tener voluntad, conocer el lenguaje, reconocer cuál es el modo más pertinente para tratar una persona y demás.
- Siempre se ha resaltado su carácter divino, motivo por el cual los siguientes atributos hacen parte de: omnisciencia, omnipresencia, omnipotencia y eternidad.
- Son varias las maneras en las que se lo denomina a lo largo del Nuevo Testamento:
- El Espíritu de Dios.
- El Espíritu de Cristo.
- El Espíritu Eterno.
- El Espíritu de Verdad.
- El Espíritu de Gracia.
- En el Antiguo Testamento se lo puede encontrar realizando varias actividades como:
- Dando aliento a los hombres y animales.
- Actúa en la creación.
- Capacita a los hombres para la batalla.
- Capacita a los profetas para que anuncien el mensaje del Señor.
- Durante el Antiguo Testamento estuvo en medio del pueblo de Dios, capacitando a varios hombres para la realización de algunas tareas especiales.
- El primer trabajo o tarea del Espíritu Santo, consistió en convencer al hombre que para evitar el pecado y acceder al perdón sólo se podía por medio de Jesucristo.