Los huesos tienen la capacidad de regenerar diariamente sus tejidos, sin embargo, el proceso natural de envejecimiento hace que el desgaste se produzca en mayor proporción a su regeneración y de allí la importancia de ingerir diariamente determinadas cantidades de este mineral para prevenir su fragilidad y deterioro. Lo ideal es que esta ingesta diaria sea de alta solubilidad y biodisponibilidad que es el calcio que procede de elementos vegetales. Con ello podremo evitar problemas de hipocalcemia
Los requerimientos de dicho mineral varían de acuerdo a la edad y el género de las personas y por lo general durante la adolescencia y la segunda mitad de la vida es cuando mayor necesidad de este mineral se manifiesta. Hay una edad en la cual nuestro organismo entra en un balance negativo de calcio ya que los huesos pierden más de lo que reciben y se vuelven frágiles y porosos.
El tipo de alimentación y los hábitos de vida determinarán la velocidad de pérdida de calcio y es allí cuando debe considerarse la suplementación, una dieta moderada en proteínas y la práctica regular de ejercicios para reducir los riesgos de sufrir de osteoporosis y otras enfermedades de los huesos.
Calcio y belleza
Este mineral es de vital importancia para la salud y belleza de las personas. Además de su relevancia para los huesos, el calcio es parcialmente responsable de la firmeza y tonicidad de nuestra piel gracias a su presencia en los tejidos subcutáneos que contribuye a la cohesión celular y dan lugar a una correcta alineación y espesor.
Por otra parte este mineral es indispensable para el metabolismo celular de la piel e impide la formación de enzimas responsables de la degradación de sus fibras elásticas. Participa en la producción del colágeno que es el responsable de darle una apariencia tersa y firme a la piel y además promueve la producción de los lípidos intercelulares.
El déficit de calcio, con el pasar de los años, puede generar una piel más rugosa y áspera, fomentando la aparición de arrugas en el rostro, por lo que se sugiere una ingesta diaria adecuada de este mineral para prevenir la aparición prematura de líneas de expresión.
Entre los alimentos ricos en calcio que debes incluir en tu alimentación figuran la leche baja en grasas y sus derivados, quesos, yogures, verduras, cebolla, espinacas, vegetales de hojas verdes, pescados de mar como el lenguado y/o salmón, hígado, frutos secos, nueces y semillas. Deben evitarse las castañas y los higos.