Lograr una administración ordenada del dinero familiar en realidad no es tan sencillo de conseguir como la mayor parte de las personas piensan, ya que son muchas las variables que se deben considerar, las situaciones por solucionar, además de por supuesto estar pensando siempre hacia el futuro.
Considerando los puntos anteriores, te invitamos a conocer algunos consejos para mejorar la economía familiar, que se puede llevar a la práctica sin muchas complicaciones y que en caso de ser respetados, para garantizar un éxito seguro en materia de finanzas para el hogar.
Consejos básicos para ordenar la economía familiar
Sin lugar a dudas la economía incide en todos los aspectos de la vida, razón por la cual si no se presta mucha atención a ella, es probable que no marche muy bien la propia convivencia dentro del seno familiar.
- La comunicación como la base de todo. Del mismo modo que ocurre con una gran empresa, es fundamental que todas las decisiones sean comunicadas y discutidas en algún punto. Pienso por ejemplo en organizaciones que hacen plataformas como miskuentas para que todo quede registrado y a disposición de ser discutida. De este modo debe funcionar la economía familiar.
- Ahorrar poco a poco. En cuanto se marquen los objetivos que sean compartidos por todos los miembros que la familia, una excelente idea será distribuir los ingresos entre un 5% a un 10% para destinarlo un fondo conjunto de ahorro mensual.
- Aprender a usar las tarjetas. En realidad la tarjeta de crédito debe ser usada únicamente para casos de emergencia, ya que no se trata de dinero que está a tu disposición sino de un préstamo y por ende estás comprando con algo que en verdad no te pertenece. Lo más pertinente es evitar realizar el gasto e intentar hacer todo lo posible por guardar las tarjetas de crédito en la mayor cantidad de tiempo, pues son tu salvavidas y no una primera opción.
- Llevar un registro de los gastos. Una contabilidad casera de los gastos es fundamental para saber cuánto dinero se está gastando al mes y por ende realizar proyecciones a futuro que sean de ayuda para posibilitar el ahorro.
- Tomar precauciones. Además del fondo del ahorro, no estaría mal ser precavidos y destinar parte del dinero para tratar de solventar aquellas situaciones que hacen parte de la incertidumbre de la vida, es decir, eventos que no se espera sino que simplemente ocurren.